Por las necesidades de recursos requeridos por la pandemia del Covid-19, unos documentos no urgentes para esta reunión virtual, y las decisiones tomadas en esta Asamblea, serán publicados en una fecha posterior. Esta decisión se tomó para permitir un uso prudente de los recursos y refleja las prioridades actuales de la Organización. Normalmente, la AG aborda todos los asuntos relacionados con la salud mundial como los planes de vacunación para la prevención y control de la meningitis, las enfermedades tropicales descuidadas, la erradicación de la poliomielitis, y analiza los informes anuales sobre recursos humanos, la aplicación del reglamento Sanitario Internacional, y el presupuesto anual.

La pandemia de Covid-19 ha impactado la vida de todos a escala global y, por ende, se nos ha aconsejado de modificar nuestros comportamientos y nuestros hábitos para sobrevivir a la pandemia y minimizar el número de decesos. Sin embargo, cada país y nación tienen sus propios protocolos y ofrecen sus propias guías para enfrentar a la pandemia. Estas diferencias han creado confusión e hizo que surgieran preguntas sobre los métodos escogidos, así como sobre las medidas adicionales que hubiesen podido ser adoptadas para controlar la propagación del virus. Como era de esperarse, la OMS por ser el líder mundial en salud, ha recibido una significativa atención durante este tiempo. Es parte del Grupo de la ONU para el Desarrollo Sostenible y ha sido creada para abordar los problemas de salud de todo el mundo y así ayudar a los pueblos a mantener un elevado estándar de bienestar. La OMS tuvo, por ende, una relevante presencia en los medios de comunicación por toda una gama de actividades que ha ofrecido, por ejemplo, aconsejando las precauciones que seguir durante esta pandemia, respondiendo a las preguntas sobre el virus Covid-19, y compartiendo proyecciones sobre su trayectoria posible.

Al mismo tiempo, la OMS ha sido también objeto de controversia durante los últimos años, y su presencia de primer plano durante este tiempo le ha ganado aún más la atención de los críticos.

La OMS depende de la financiación de sus Estados miembros, y algunos grupos están presionando sus gobiernos para que suspendan de financiarla. La OMS, diseñada para hacer frente a todos los problemas de salud en un plan internacional es también blanco de grupos conservadores que la han acusado de interpretar de manera invasiva los temas relacionados con la salud sexual y reproductiva incluyendo el aborto, los derechos de LGBT, la prostitución, las cirugías por la reasignación del sexo, la masturbación, y el vientre de alquiler.

Entre los movimientos que se oponen a la OMS está CitizenGo, un grupo cristiano conservador, que entre otras iniciativas apoya el intento en curso de los Estado Unidos de suspender la financiación de la OMS. En un correo reciente a sus seguidores, afirman, “Una organización sanitaria mundial que bombea miles de millones de dólares al año en nuestra sociedad para causar perjuicios a nuestros niños no es necesaria. El plan del Presidente Trump de suspender la financiación la OMS nos ofrece una real oportunidad de ver terminada esa agenda global que se opone a nuestros valores”. Ellos, y muchos otros, creen que la OMS no debe ser financiada con dinero público por su implicación en temas que contradice ciertos valores. El presidente Trump ha llegado a amenazar con cortar la financiación de la OMS por parte de los Estados Unidos de forma permanente a menos que la OMS se comprometiera a “importantes y sustanciales mejoras” dentro de treinta días. Ha sido una escalada significativa en sus repetidos intentos para culpar la OMS y la China por la propagación del virus.    

Por otro lado, hay personas individuales, organizaciones y Estados que apoyan la OMS porque reconocen la importancia de sus intervenciones para proporcionar información al público sobre prácticas seguras de salud, incluyendo las que caen bajo el espacio de la salud sexual y reproductiva. El objetivo de la OMS es frenar la propagación de la desinformación proveyendo datos y enseñando alternativas más seguras y saludables, incluso con respeto a temas controvertidos como el aborto. Por ejemplo, la OMS ofrece recursos que informan las mujeres sobre la disponibilidad de servicios de un aborto seguro afín que no arriesguen sus vidas usando métodos peligrosos. Así, la OMS ha publicado un artículo sobre el aborto a riesgo acompañándolo con una lista de datos generales, explicando en profundidad  el porqué representa un riesgo grave para la salud y ofreciendo alternativas más seguras.

La OMS es, por su naturaleza, una organización por la salud y, por supuesto, incluye temas que puede resultar incómodos al ser abordados, pero esa es exactamente la razón por la que necesitan ser debidamente discutidos. La información errónea se difunde fácilmente por la ignorancia, así que es crucial proveer una información correcta y fuentes fiables para obtenerla. No discutir estos temas, es lo que los hace incontrolables y los convierte en un peligro colectivo.

El Covid-19 ha producido acalorados debates sobre una futura vacuna y sobre las medidas que los países han tomado para mitigar su propagación y las formas eficientes de colaboración entre los gobiernos. Dos asuntos han despertado mucha atención en la AG de este año.

La Asamblea debía evaluar la posibilidad de una investigación sobre el origen de Covid-19. Un proyecto de resolución había ya recibido el apoyo de 116 países, con miras a obtener el acuerdo sobre una resolución de Europa y Australia que pedía “un proceso de evaluación” a ponerse en marcha para examinar la respuesta sanitaria internacional y las medidas adoptadas por la Organización en respuesta a la pandemia. Para que se apruebe una resolución de este tipo, se necesita el acuerdo de dos tercios de los 194 miembros de la Asamblea. Pekín desde el comienzo se opuso firmemente a la hipótesis de esta investigación. El Secretario General de la ONU, Antonio Guterres, llegó hasta expresar su desacuerdo sobre una eventual investigación en su discurso de apertura de la Asamblea en el que declaró: "Este no es el momento para una investigación”. Por el contrario, pidió a los 194 Estados de permanecer unidos dejando la investigación sobre el origen del virus para "Cuando la pandemia haya quedado atrás".

China también se opuso a la presencia de Taiwán en la AG de la OMS. Sin embargo, vale la pena señalarlo, Taiwán hubiera podido proporcionar información crucial sobre el manejo de la pandemia, ya que su particular respuesta al virus fue eficiente y dio resultados positivos. La petición de la UE y de Australia, firmemente apoyada por los Estados Unidos, obtuvo al final el acuerdo de la Asamblea. A Taiwán, sin embargo, se le negó de nuevo de volver a ocupar el escaño que tuvo durante mucho tiempo en la OMS, una decisión criticada no sólo por los Estados Unidos, sino de muchas otras partes por disminuir la universalidad y la eficiencia del trabajo de la OMS.  

La Asamblea General de la OMS concluyó el 19 de mayo de 2020. Sus documentos y grabaciones vídeo están a disposición del público - sus resoluciones serán publicas más adelante -, porque la gente tiene derecho a acceder a una información adecuada de lo contrario será  tentada de buscarla por caminos sesgados.

Dejar a las personas sin una guía adecuada puede llevarlas a tomar las decisiones equivocadas. Incluso durante esta pandemia, se ha podido constatar cómo el empoderamiento del conocimiento sobre Covid-19 ha salvado vidas y proporcionado esperanzas para superar la epidemia. La misión de la OMS es capacitar a las personas con los conocimientos necesarios para mantener en buen estado todos los aspectos de su salud. Si hay una valiosa lección que hemos aprendido durante esta pandemia, es que la salud no es algo que se debe dar por sentado