Justicia, Paz, Integridad<br /> de la Creación
Justicia, Paz, Integridad<br /> de la Creación
Justicia, Paz, Integridad<br /> de la Creación
Justicia, Paz, Integridad<br /> de la Creación
Justicia, Paz, Integridad<br /> de la Creación

Villano y víctima del Ébola

25.11.2014 Amira Ali - Pambazuka Traducido por: Matteo Manfredi La variación de estilos de los medios de comunicación occidentales en informar sobre el Ébola,  confirman cómo la narrativa es espacio de dominación. El enfermo de Ébola africano está clásicamente etiquetado como "el otro" intrínsecamente diferente y retratado como  villano agresor, mientras que el enfermo norte americano  es representado como víctima.

En la actualidad, narrar sobre las tragedias humanas suena más como un cuento de ficción, y tal vez la ficción, tenga más humanidad.

Los titulares sensacionalistas referentes a lo relacionado a las tragedias  africanas son una rutina para los medios de comunicación occidentales, pero la cobertura actual de noticias sobre la "guerra contra el Ébola"  se ha convertido en una inundación omnipresente. Es como en las escenas de una película escalofriante, con un sinfín de imágenes de trabajadores en trajes de materiales peligrosos para provocar miedo y enfatizadas con un claro lenguaje del folklore médico, cuyo objetivo parece ser confundir y aumentar la ansiedad del público.

Frecuentemente, con la obsesiva presencia de blancos hablando sobre África -esta imaginación popular heredadas de la era colonial con ideas diseminadas en masa-, se constata una proliferación de una visión unilateral.
En general, en un estilo narrativo monótono y peligroso, el villano es casi siempre el africano y el héroe se parece mucho más al narrador occidental...

Sí, es un hecho que la fiebre hemorrágica del Ébola está causando estragos en el África occidental, y sí, algunos han dicho que es una espiral fuera de control, lo cual socava la  estructura social y expone las débiles instituciones públicas. Dicho esto, Mandisi Majavu nos recuerda que "la mala situación de salud en África existe, en gran parte, debido al colonialismo, al imperialismo y a la desigualdad global... Y aún más, lo que debilita las estructuras es que los desastres -como se llama las epidemias- se gestionan desde "manuales para el uso" que dan todos la impresión de haber sido preparados para destruir y desmantelar las estructuras locales. Por lo tanto, la desconfianza reportada en algunos países de África occidental en relación con la propagación de la enfermedad del Ébola no es de ninguna sorpresa, y es tal vez justificada.

Narrativas dominantes y representación

La variación de estilos de los medios de comunicación occidentales en informar sobre el Ébola confirma cómo la narrativa es espacio de dominación. Los escenarios y las historias de la llegada del virus desde África a los Estados Unidos varían rápidamente, pero la inundación de rasgos sensacionalistas que tratan el cuerpo del africano como un objeto, a beneficio de los lectores occidentales, es siempre molesto, pero no es nada nuevo. El modo como los seres humanos son representados, es tristemente evidente; para algunos de nosotros, el lenguaje tiene una tonalidad inhumana y las imágenes reductivas que se propagan más que preocupantes son degradantes.

Haciendo hincapié: la narrativa predominante es "que los negros africanos que viven en los países occidentales son esos 'otros' enfermos que constituye una amenaza para la salud de los blancos ", mientras que la población  local de África es retratada como no cualificada y en extrema necesidad de ser salvada por el oeste.

Además, el discurso actual alrededor de la explosión del virus, más allá del racismo médico -ver Teju Cole "la incontinencia explosiva de la agencia de noticias Fox”, pretende recordarnos cómo "la lacra del anti negro es salvaje, mortal y  global"... 

Como Narcisse Jean Alcide Nana sostiene: "Los principales clichés y algunas alegorías fuertes evocan los espasmos de este malestar en curso, hasta el punto de simplificar demasiado la portada de la seguridad de África".

Narrativas de villanos y víctimas

El paciente de Ébola africano es clásicamente "el otro" y es retratado como un villano y un agresor, mientras el paciente americano de Ébola es representado como una víctima.  Tratar  a África como sucia e infectada de enfermedades es más que preocupante. La portada de la revista  Newsweek de Agosto del 2014 presenta la imagen de un chimpancé con las palabras: "Una  puerta trasera para el Ébola: el contrabando de carne de animales silvestres podría desatar una epidemia en los Estados Unidos". En su conjunto, el significado escondido en la ilustración, es el espacio común históricamente patológico y racial, al mismo tiempo que el reportaje muestra un incompetente e inmoral desempeño periodístico.

Si bien que estas y otras fuentes alimentan el pánico y reacciones racistas dentro y fuera de las fronteras estadounidenses; ver Ismael Bah: se nos ha informado que "en Alemania, una mujer africana, quien había viajado poco antes a Kenia -lejos por lo tanto de los países afectados- se enfermó en su trabajo a causa de un virus estomacal y todo el edificio fue clausurado. En Bruselas, un hombre africano tuvo una sencilla hemorragia nasal mientras se encontraba en un centro comercial y el almacén donde esto sucedió fue esterilizado. En Seúl, un bar expuso un cartel que decía: "Pedimos disculpas pero debido al virus del Ébola no aceptamos africanos".

El artículo del New York Times -Octubre 5, 2014- titulaba “El viaje de una Víctima de Ébola desde la Guerra de Liberia a la Lucha por su vida en los Estados Unidos”.

Un artículo que habla de Thomas Eric Duncan, el ciudadano liberiano que durante su visita a los EE.UU. fue diagnosticado con Ébola en  Dallas,..., intenta vender una historia que más del Ébola enfatiza los EE.UU. como "salvador de vidas". Hasta el punto que, en vez de preocuparse por el estado de salud del  paciente, en un enfoque perturbador e intrusivo sin sentido, se adentra en el historial privado del enfermo tejiendo la historia de la madre de su hijo. Además, para hacer más sensacional la historia reporta detalles irrelevantes, como la descripción del interior de la vivienda –los tipo de muebles con que vivía, el color del piso, etc.-, donde Duncan se alojaba durante su visita en los EE.UU. Así mismo, irrespetando aún más la privacidad del paciente, publica un gráfico completo de cómo estaba distribuido el apartamento...

El 6 de octubre de 2014, la CNN, en un artículo titulado: ¿Quiénes son los pacientes Americanos de Ébola?, publicaba una lista con los nombres de los pacientes norte americanos; edad y donde trabajan; donde hubo la infección y el estado de salud del paciente. El 9 de septiembre de 2014, Fox News informó la llegada de otro paciente de Ébola norte americano en el Hospital de la Universidad de Emory; el anuncio fue hecho desde el hospital añadiendo: "la identidad y el estado de salud siguen siendo confidenciales"... Al mismo tiempo, mostrando el límite de sus conocimientos geográficos, el 9 de septiembre de 2014, Fox News se trabó la lengua por no saber hacer la distinción entre Liberia y  Nigeria. ...Aprovechando del creciente miedo y la ansiedad, el Ébola es retratado como la enfermedad del enfermizo hombre negro que se vuelve una carga para los demás. Al contrario, los enfermos estadounidenses son presentados más bien como "un complejo industrial de blancos salvadores"; son trabajadores humanitarios o voluntarios que han viajado a Liberia para salvar vidas y sufren ahora las consecuencias por haber estado haciendo el bien y ofreciendo servicios caritativos. Y cuentan sus historias en un tono sentimental y los hacen víctimas de una enfermedad "africana".

De manera típica, los escritos señalados y otros que aquí no se mencionan, ponen en evidencia cómo las narraciones son usadas por los grupos dominantes como espacios para asumirse el derecho a definir la identidad de los demás. En vez de educar al público y de adoptar posturas de comunicación responsables delante de un brote que se proyecta puede infectar a "más de 1,4 millones de personas en las próximas semanas", se usa la oportunidad para alimentar el miedo.  Se insiste en una  cobertura mediática que dice mucho sobre la militarización de los epicentros de Ébola en África Occidental y en todo cuanto incita el pánico -mientras que según lo declarado por Horace Campbell "no se da ninguna atención a las medidas para educar a la gente"-, y no se hace ningún esfuerzos con miras a hacer frente y sostener la abrumadora necesidad de "disminuir la racialización del Ébola y aclarar que el primer brote reconocido tuvo lugar no en África,  sino en Marburg (Alemania), y de ahí el nombre dado al Ébola como Virus de Marburg". 

Después de haber dicho todo esto,... al final, lo que mayormente debemos preguntarnos y que va a importar más, es cómo contener este virus letal y cómo pueden movilizarse los africanos para salvar a los propios africanos... De manera significativa, según lo que dice Horace Campbell, "Las mismas instituciones y organizaciones que han estado en la vanguardia de la guerra bio-económica en África porque no saben lidiar la movilización contra el Ébola". Además, "ECOWAS ha sido capaz en el pasado de intervenir en Liberia y Sierra Leona para conseguir la paz. En conjunto, ECOWAS y AU tienen las capacidades técnicas y médicas para dar una vigorosa respuesta al Ébola. La percepción en el extranjero de que África no tiene el personal médico para luchar contra esta epidemia es equivocada. Por lo tanto, la capacidad de movilizar los recursos en África para una respuesta más enérgica, depende de la voluntad política".

http://www.pambazuka.net/

 

Deje un comentario